Por: Esteban Valenzuela Van Treek.
Vicepresidente de la Federación Regionalista Verde Social. Dr. en Historia (Valencia), Máster en Ciencias Políticas (UC) y en Desarrollo (Wisconsin). Director del Magíster en Estudios Sociales y Políticos Latinoamericanos de la U. Alberto Hurtado. Ex – presidente Comisión de Estado para la Descentralización (2014). Fue Alcalde y Diputado por Rancagua.
Nelson Mery, director de Investigaciones en 1996, me dijo: “si estás tan chorito con esa mafia debes grabarlo, hacerlos traer parte de la coima y allí te mando a un oficial de confianza para apresarlo con delito flagrante”.
La historia es conocida: terminaba mi período de alcalde de Rancagua, no iría a la reelección por mi decisión de estudiar desarrollo y descentralización bien hecha en Wisconsin, habíamos innovado para crear una asociación de 12 municipios para hacer un relleno sanitario óptimo con los debidos estudios y en la licitación para su construcción competía KDM con un consorcio francés. Dos años antes para el contrato de la recolección de la basura nos habían tratado de coimear, expulsé al italiano personaje de mi oficina y los abogados de la Municipalidad fueron categóricos: “no tienen pruebas, lo acusarán de infamia”.
Instalamos los micrófonos en mi escritorio, los oficiales de Investigaciones con mi jefa de gabinete en la oficina contigua. Apareció el pobre Eric Cifuentes, el enviado de KDM con sus fajos de billetes, lo hago hablar y se explaya sobre lo natural de las coimas en la red vinculada a la derecha en el Barrio Alto y en los concertacionistas traidores de la lucha democrática y popular que se enriquecían en la zona poniente. Habló con nombres y apellidos. Todo dispuesto para desbaratar la mafia. Tomé el teléfono y lo apresaron. El Rancagüino fue testigo y sacó las fotos. Se hizo el escándalo.
Sobrevino la pesadilla. En vez de héroe, traidor y sobre actuado para buena parte del PPD. KDM contactó al fenicio bufete Hermosilla family y tuve que echar de mi oficina al siniestro abogado que sugirió que podían llegar a un acuerdo o me denunciarían por recibir de la otra empresa y trabar una trampa. No hubo ONGs ni nadie que respaldara. Tan sólo la decencia de los abogados regionales del Consejo de Defensa del Estado. Al final CIfuentes era un mero relacionador público de KDM, nada le corrió a Ventura Sánchez el gerente. La multa por coimas es un porcentaje de lo ofrecido y la jueza a cargo no quiso ir más allá de la anécdota y se quedó con la grabación- debe estar allí aún si la Fiscalía se decide a estudiar la mafia que pervive con su red de asociación ilícita-. La Corte de Apelaciones no hizo nada para investigar y se sentó la impunidad.
Desde el 2010 CIPER y El Mostrador han venido sistemáticamente denunciando como KDM se ha quedado con casi el 70% del ciclo de la basura metropolitano (22 municipios le entregaron sus contratos hasta el 2027 y en Rancagua la derecha le entregó a ellos el mismo relleno sanitario “decente” que se construyó tejiendo seriedad).
Luego se han sucedido los escándalos de compra de concejales y alcaldes en el sector poniente y el Barrio Alto. Maipú, Cerro Navía, Ñuñoa, entre tantos. Se informa de la caída de políticos y nada de apresamiento de los gerentes. Tiltil sufre la mala gestión del relleno, el mediocre traslado y sigue el sacrificio en el clásico proceso de corrupción: no se fiscaliza cuando se compra y cooptan instituciones completas.
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