Entrega de equipamiento, incorporación de tecnologías, capacitación, asistencia técnica y la creación de una Escuela Mina Planta, marcaron los últimos cuatro años, donde el broche de oro fue contar con poder de compra para la pequeña minería
En cuatro años la Seremi de Minería de la Región de O’Higgins, Leonor Díaz Salas, lideró el trabajo para apoyar el desarrollo de pequeños mineros, canteros y salineros, donde a través de los Programas de Capacitación y Transferencia Tecnológica para la Pequeña Minería Artesanal, PAMMA, del Ministerio de Minería, y del Programa FNDR de Transferencia y Fomento a la Pequeña Minería, se materializó el apoyo a mineros metálicos, canteros y salineros de Cachapoal, Colchagua y Cardenal Caro.
“En estos cuatro años pudimos materializar, a través de la incorporación de tecnología y equipamiento, capacitación y asesoría técnica integral con un equipo de profesionales de las áreas de minería, geología, topografía, prevención de riegos y derecho, la tarea encomendada por la Presidenta Michelle Bachelet de fomentar el desarrollo de este sector productivo tan importante para la Región y el país”, comenta en exclusiva para Poder y Liderazgo, la máxima autoridad del sector en la Región de O’Higgins, Leonor Díaz Salas, quien hace un balance del trabajo realizado desde que asumiera la secretaría regional ministerial.
Mineros metálicos
En Chancón, en la comuna de Rancagua, se ubican, principalmente, los mineros metálicos de la Región, los que explotan minas de oro, plata y cobre. Con ellos, y con los ubicados en comunas como Litueche y Graneros, entre otras zonas, el trabajo se concretó a través de la incorporación de maquinaria como mini tractores y mini cargadores que permitieron dejar la carretilla y la pala como elementos para retirar el mineral.
También se financió la compra de perforadoras y compresores, esenciales en la tarea de explotación. El financiamiento de la ejecución de metros de labor, que permite encontrar nuevas vetas de mineral, fue otra de las formas permanentes de apoyo para mejorar la productividad del sector.
La normativa vigente hizo esencial el apoyo con un equipo multidisciplinario de profesionales. Así, los pequeños mineros pudieron presentar sus planes de explotación y cierre, dar cumplimiento a las materias de seguridad, realizar levantamientos topográficos, análisis geológicos, y resolver dudas sobre materias legales, propias de la minería. Antes, debían contar con los recursos económicos necesarios para acceder a estos servicios, hoy los otorga, gratuitamente, el equipo FNDR del Programa Transferencia y Fomento a la Pequeña Minería de la Región de O’Higgins, que financia el Gobierno Regional.
La calidad de vida también fue un punto importante y se entregaron recursos para la adquisición de contenedores que fueron habilitados con cocina y baño, mejorando así el confort de los campamentos de los pequeños mineros. A ello se sumó la adquisición de un camión aljibe, vía un proyecto presentado por la Asociación Gremial de Pequeños Mineros de la VI Región, ASOMIN, que permitirá llevar agua potable a los campamentos de Chancón.
Capacitación y competencias laborales
La capacitación también fue un sello, y a través del Programa PAMMA, cada año, se instruyó a mineros y canteros en materias relacionadas con la seguridad y la explotación minera.
A esta tarea anual de capacitación se suma el “Programa Piloto de Evaluación y certificación de Competencias Labores para la Pequeña Minería Artesanal”, destinado a la Región de Valparaíso y O’Higgins, que se financia con recursos del Programa de Capacitación y Transferencia Tecnológica para la Pequeña Minería Artesanal, beneficiando a 140 pequeños mineros, de los cuales 70 son de Chancón, quienes se certifican como maestros de mina subterránea u operadores de pala de menor tamaño en mina subterránea.
Otro importante avance fue a fines del 2017, al materializarse el curso, que financiado con recursos del Fondo Concursable del Programa FNDR, permitirá crear y equipar una brigada de rescate minero y de prevención de incendios forestales para la pequeña minería de O’Higgins. La iniciativa hizo posible que 15 pequeños mineros de Chancón, junto a funcionarios del GOPE de Carabineros, de la SEREMI de Minería y de Sernageomin se capacitaran en temas como perforación, carguío de explosivos, ventilación, acuñadura, transporte de mineral, procedimientos y técnicas de salvamento y rescate, así como prevención de incendios y comunicación en una emergencia, entre otros tópicos.
Seguridad y alianzas
Un Convenio firmado entre la Corporación Del Libertador y el Ministerio de Minería benefició a pequeños productores mineros -metálicos y no metálicos- de las tres provincias de la Región, quienes recibieron equipos de protección personal, extintores y botiquines, además de capacitación en materias de seguridad y cuidado del medioambiente. Para ello, se estableció una Mesa de Trabajo donde participaron la Dirección Regional del Trabajo, el Instituto de Seguridad Laboral y CONAF.
Una alianza con el SENCE, permitió que la Seremi de Minería actuara como Entidad Requirente, a través del Programa Becas Laborales, lo que se tradujo en la ejecución de cursos específicos para mineros, canteros y salineros, durante los años 2016 y 2017.
Un capítulo especial tienen las mujeres de las comunas de Paredones y Pichilemu, donde se produce la sal de mar, quienes se capacitaron en los niveles I y II del curso “Generando valor agregado a la sal de mar”.
El apoyo constante a los canteros
En las comunas de Coínco, Malloa y Placilla se encuentran los canteros que recibieron apoyo de la Seremi de Minería, a través de los Programas PAMMA y FNDR que les hicieron adquirir equipamiento como tecles, chancadores de mandíbula y roto martillo, además de financiar trabajos para mejorar el acceso a sus canteras, entre otras importantes iniciativas.
En materia de calidad de vida, la Cooperativa de Canteros de Malloa recibió apoyo para la adquisición de un estanque para almacenar agua potable. Así, junto con contar con el vital elemento, los pequeños productores de la piedra rosada pudieron regularizar en materia sanitaria sus faenas.
El Convenio “Apoyo al Mejoramiento de la Competitividad e Innovación en Pequeños Mineros No Metálicos de la Región de O’Higgins y El Maule”, firmado entre la Corporación Del Libertador y el Ministerio de Minería, otorgó 50 millones de pesos que beneficiaron a los canteros del sector Manantiales de Placilla, a sus pares de la comuna del Maule, en la Región del mismo nombre; y a los salineros de Cardenal Caro.
En el caso de la Sociedad de Canteros Patio de Piedra, del sector Manantiales, pudieron implementar su campamento minero, a través de la adquisición de dos contenedores. Junto con mejorar el acceso a la cantera, recibieron apoyo para adquirir un chancador de mandíbula, que les permite que, a partir de material de descarte, elaboren un nuevo producto: piedras para ornamentar jardines.
De acuerdo a lo señalado por el Presidente de la Sociedad de Canteros Patio de Piedra, Samuel Vargas Pacheco, este apoyo es un hito indiscutible, pues “estamos agradecidos, infinitamente, de este Gobierno que nos ha apoyado para poder lograr lo que tenemos acá, que significa poder darle un buen estudio a mis hijos y a los hijos de mis compañeros de trabajo; por eso reconocemos la oportunidad que se nos dio, el año 2015, de independizarnos, desde entonces, hemos tenido muchos logros y ya tenemos algo propio y sabemos que continuaremos en este camino”. Asimismo, en el caso de los canteros de la Región del Maule, el apoyo entregado se tradujo en herramientas como carretillas, palas, equipos de protección personal, que les permitirán mejorar su productividad.
Salineros y yodado de la sal de mar
En los sectores de Lo Valdivia, comuna de Paredones, y Cáhuil, Barrancas, y la Villa, se encuentran los salineros que producen sal de mar, producto único y con Sello de Origen, cuyos productores fueron declarados Tesoros Humanos Vivos, por desarrollar esta labor ancestral, que ya suma más de 500 años de tradición.
Con ellos, la Seremi de Minería realizó una serie de acciones tendientes a incorporar tecnología y buscar nuevos mercados para este producto. En ese contexto, destacan los recursos para el mejoramiento de los pretiles de las salinas, así como la entrega de herramientas como carretillas, palas, romanas digitales y motobombas y la implementación de salas de proceso y envasado de la sal de mar, que son todas tareas que apuntan a la búsqueda de nuevos mercados para este producto que mejoró considerablemente su precio, el que pasó de $3.500 el valor del saco a un promedio de 15 a 20 mil pesos. Esto trajo aparejado el interés por producir más sal, y a través de recursos PAMMA y FNDR se financiaron proyectos que permitieron recuperar salinas que estaban en desuso.
Asimismo, la decisión de la Junta Nacional de Auxilio Escolar y Becas, Junaeb, que se enmarca en su Plan Contra la Obesidad Estudiantil, resolvió que -a partir del 2017- la alimentación que reciben los estudiantes de establecimientos públicos y particulares subvencionados de la Región de O’Higgins, reemplazara la sal procesada por sal de mar. Ello implica que los salineros tienen un nuevo mercado, que en el futuro incluirá a los establecimientos de todo el país.
Entonces, surgió un nuevo desafío, el poder controlar el yodado de la sal de mar. Para ello, y en el marco del Convenio “Apoyo al Mejoramiento de la Competitividad e Innovación en Pequeños Mineros No Metálicos de la Región de O’Higgins y El Maule”, se materializó la instalación –en Cáhuil- de una Sala de Control del Yodado de la Sal de Mar.
Como lo destaca Marco Labarca, Presidente de la Cooperativa Campesina de Salineros Salinas Grandes de Cáhuil, Barrancas y La Villa: “Estamos felices porque es un sueño para los salineros poder comercializar la sal para el consumo humano y para ello, la normativa vigente nos exige cumplir con su yodado, y hoy, podemos hacerlo y llegar a nuevos mercados; asimismo, con los recursos PAMMA y FNDR, podremos reparar los fuertes que resultaron muy dañados por el terremoto, y que no se había podido realizar por falta de recursos; hoy podremos hacerlo, lo que es muy importante para nuestra labor”.
Poder de compra: el broche de oro
El 2017 se cierra con un gran hito para la pequeña minería de la zona: un poder de compra de propiedad de la Empresa Nacional de Minería para la Región de O’Higgins. La acción fue posible gracias a las gestiones del Ministerio de Minería y en ceremonia liderada por la Ministra Aurora Williams se materializó la firma de un Convenio entre Enami y Minera Valle Central, que permitirá responder a un anhelo, que desde hace 20 años tienen los pequeños mineros de la región. La iniciativa beneficiará a más de 200 pequeños productores de oro. La planta cumplirá con la recepción, chancado y acopio del mineral.
“Escuchar las necesidades de la industria minera y buscar mecanismos en conjunto con los interesados para agilizar respuestas ha sido la base de nuestro trabajo como Ministerio. El diálogo ha sido el paso previo para diseñar y ejecutar estrategias que hagan de la actividad -en toda escala productiva- más moderna, innovadora, sustentable e inclusiva, lo que a su vez es lo que permite convertir al rubro en una plataforma de desarrollo integral”, sostuvo la Ministra Williams en la ceremonia.
Minería, Educación y Mujeres Mineras
No solo trabajo con los pequeños productores desarrolló la Seremi de Minería, sino que también con quienes se convertirán en los futuros mineros de la Región y el país. En ese contexto, surge la iniciativa “Escuela Mina Planta” proyecto emblemático que lidero Leonor Díaz, y que responde a la sentida necesidad de los estudiantes que cursan carreras mineras, de contar con un espacio, técnicamente adecuado, para realizar sus prácticas de formación.
Acogida la demanda, se convirtió en un proyecto que ejecuta, técnicamente, la Universidad Adolfo Ibáñez, gracias a los recursos entregados por el Consejo Regional, vía el Fondo de Innovación para la Competitividad, FIC y a los aportes que realizó la ASOMIN, Agrupación que entregó en comodato –a 25 años- su sede social y terrenos, donde se emplaza la Escuela Mina Planta.
Definido como una iniciativa esencial para la educación de la Región de O’Higgins, atiende desde mediados del 2017, a los alumnos de carreras mineras de los liceos técnicos: Francisco Antonio Encina Armanet de Las Cabras, Ernesto Pinto Lagarrigue; Presidente Pedro Aguirre Cerda, Instituto Tecnológico Minero Bernardo O’Higgins y Liceo Machalí, de Rancagua y Machalí, respectivamente.
El costo total del proyecto son 700 millones de pesos y ya se han financiado –vía 2 proyectos FIC- las primeras 2 etapas, con una inversión de más de 398 millones de pesos.
Presencia femenina
“Fomentar la incorporación y permanencia de la mujer al mundo de la minería es uno de los compromisos de la Agenda de Género de la Presidenta Michelle Bachelet, y en ese contexto se enmarca el Programa Mentorías”, puntualiza la seremi, resaltando que nació en el año 2016 como un Programa Piloto del Ministerio de Minería que escogió a la Región de O’Higgins para ejecutarlo. Sus protagonistas son las alumnas de los cinco liceos técnicos que cursan carreras mineras, las que son guiadas por mujeres profesionales de las empresas El Teniente y Minera Valle Central, conociendo in situ este sector productivo, tradicionalmente masculino.
Son muchos los avances y numerosos los proyectos que ha desarrollado el Ministerio de Minería en la Región de O’Higgins, bajo el alero de una autoridad que ha sabido darle un sello propio a su quehacer y que se ha concretado en beneficios para cada sector que forma parte del mundo minero.