Estudio realizado por Chiledeudas reveló que durante sólo un año más de 140 mil plásticos fueron emitidos por entidades bancarias y del retail, alcanzando un total superior a los 13 millones de unidades vigentes
Si bien no es negativo ocupar las tarjetas de crédito para realizar compras en el comercio nacional, cuando se lleva un control financiero inteligente, en variados casos dichos plásticos se convierten en un arma de doble filo que es el puente al sobreendeudamiento de las personas y a la morosidad, en la que se encuentran más de 4,3 millones de chilenos.
Un estudio efectuado por la empresa Chiledeudas.cl en base a la información más actualizada por la Superintendencia de Bancos e Instituciones Financieras, muestra una preocupante cifra: entre febrero de 2017 y febrero de 2018 las tarjetas de crédito bancarias y de retail aumentaron en más de 140.000 en el país, alcanzando las 13.014.564 vigentes en solamente un año.
Al respecto, Guillermo Figueroa director de Chile Deudas, resaltó que en el caso de las tarjetas de crédito con operaciones registradas, en el mismo período crecieron en 287.000 alcanzando las 4.613.977, con montos de uso que anotaron 2.333 millones de dólares en febrero de 2018, superando en más de 270 millones de dólares a lo computado en febrero de 2017.
En ese sentido, el experto en endeudamiento responsable afirmó que “hay que tener presente que las tarjetas de crédito no son una extensión de los ingresos. Es dinero que, aunque de fácil acceso permitiendo la adquisición cómoda a ciertos bienes, es prestado”.
Por lo mismo, el ingeniero comercial recomendó al consumidor que “no solamente compare las tasas de interés, sino que se fije también en el denominado CAE, que es la Carga Anual Equivalente, un indicador expresado en porcentaje que incluye los costos totales del uso de la herramienta financiera. La institución con el ítem más bajo por un mismo producto será la más conveniente”.
Enfatizando que “si el uso de las tarjetas de crédito ocasiona algún problema al consumidor, le recomiendo quedarse sólo con una, esto le permitirá organizar bien el gasto y también el pago ya que estará enfrentando el cancelar nada más que una cuota durante el mes, evitando mayores intereses, CAE y comisiones”.
Finalmente, Figueroa recomienda que comprar en comercios que ofrezcan 3 o 6 cuotas precio contado. “Debe evitar pagar el mínimo, ya que se hará cada vez más difícil cubrir el compromiso financiero en el futuro. Es una trampa psicológica, la cual sólo causa perjuicios al titular de la tarjeta”.