Cabe destacar que el 70 por ciento de estos jóvenes provienen de la región de Atacama, lo que es otra muestra del permanente compromiso de Candelaria con la educación y capacitación de los integrantes de las comunidades donde desarrolla sus operaciones

Un total de 57 estudiantes de carreras técnicas y profesionales, formados en centros de estudios de enseñanza media y superior de Atacama y otras regiones, se incorporaron este lunes 7 de enero a minera Candelaria, para realizar su práctica profesional durante este verano 2019.

Son alumnos de carreras como ingeniería, geología, medio ambiente, administración y mecánica, entre otras, y realizarán diferentes tareas en la compañía, en las áreas de operaciones, mantención, servicios, administración, etc., en las que tendrán la oportunidad de aplicar en terreno lo aprendido en sus aulas.

Del mismo modo, durante su período de práctica, tendrán la posibilidad de compartir directamente con el equipo de trabajo de Candelaria, un grupo de profesionales de excelencia y con una vasta trayectoria, que compartirán con los jóvenes sus conocimientos técnicos y les transmitirán importantes aspectos como la seguridad, cuidado ambiental y trabajo con las comunidades, entre otros.

Según Edwin Hidalgo, gerente de Asuntos Públicos y Comunicaciones de Candelaria, “este programa permite a los jóvenes conocer de cerca nuestra actividad productiva, que concentra a técnicos y profesionales de múltiples disciplinas de trabajo, con el fin de adquirir la experiencia requerida para iniciar su vida laboral. Para Candelaria, esta es una gran oportunidad de aportar al desarrollo futuro de estos jóvenes y, con ello, contribuir con su calidad de vida, sus familias y el entorno social en el que se desenvuelven”.

Para la joven tierramarillana Joshia Gordillo, egresada de Técnico en Minas de la Universidad de Atacama, “esta es una gran oportunidad que recibo, porque acá en Candelaria hay mucho campo para trabajar, considerando que tienen minas subterráneas y a rajo abierto. Así se puede aprender más de los dos tipos de yacimientos”.

En tanto, Juan Yáñez, copiapino que estudió Ingeniería en Minas en Inacap, destacó que había estado antes en Candelaria, realizando la práctica de su carrera técnica en el rajo mina, “pero ahora -como ingeniero- me asignaron a trabajar en la mina subterránea, lo que representa una buena oportunidad de conocer las dos caras de la moneda, es decir la mina a cielo abierto y la subterránea. Es una bonita instancia que me ofrece Candelaria, para seguir aprendiendo”.