Por: Cámara Chilena de la Construcción
Como constructores de Chile, hacemos propio el llamado del Gobierno a que todos los chilenos nos unamos en la construcción de los acuerdos a los que ha convocado, los cuales deben ser la base para que de esta coyuntura emerja un mejor país. Y todos, sin excepciones, tenemos el deber de aportar a que esta posibilidad se materialice.
En las últimas semanas, amplios sectores de la sociedad han levantado la voz para plantear demandas que consideramos legítimas. Deben ser los mecanismos que ofrece la democracia representativa los que prioricen y encuentren la mejor forma de satisfacerlas. Desde ya, manifestamos nuestra plena voluntad a aportar con ideas y acciones concretas a este proceso.
Sin embargo, y con el mismo convencimiento, expresamos nuestro total y absoluto rechazo a la violencia y a los actos vandálicos perpetrados por un número reducido de personas, de los cuales muchos han sido víctimas y todo el país ha sido testigo. Este no es el camino por el que la inmensa mayoría de los chilenos quiere transitar.
El camino no es la violencia, sino la paz sin condiciones; no es la división, sino la unidad entre los chilenos; no es la intolerancia, sino el diálogo abierto y constructivo; no es imponer, sino trabajar colaborativamente para consensuar nuevos y mejores horizontes que convoquen a todos y que nos lleven a ser una nación más justa y equitativa.
Nuestro país está viviendo un momento de inflexión y de lo que seamos capaces de construir juntos dependerá el destino de las actuales y futuras generaciones. Es por eso que hoy hacemos un llamado concreto y urgente a que cada cual asuma la responsabilidad y el liderazgo que le corresponde a la clase política y los distintos poderes del Estado.
Y lo mismo cabe para otros actores sociales, la sociedad civil y, por cierto, los empresarios, como es el caso de nuestros propios socios, que, en conjunto con sus trabajadores, deben continuar creando mejores espacios de encuentro, conversación y construcción de nuevas respuestas a lo que hoy exige la sociedad. Solo así, trabajando juntos, podremos hace de Chile un mejor país.
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