Por: Aldo Espinosa S. Gerente de Operaciones Casinos River

Aunque pocas veces es advertido, los envases de alimentos son sumamente importantes en el transporte, protección y entrega de información al consumidor. En el mundo actual, la seguridad de los alimentos es uno de los  grandes desafíos de nuestros tiempos: el control de calidad y la garantía de seguridad de los alimentos que consumimos, es para todos, algo habitual que implica una gran cantidad de ensayos, tanto químicos como microbiológico, para determinar con exactitud el tipo de envase apropiado para la correcta preservación del alimentos en el tiempo, y que de esta forma no afecte la salud de los consumidores y que además conserve intactas sus características organolépticas.

A los riesgos asociados a los alimentos debemos sumar un componente sumamente importante en su transporte, protección y en la que entrega información al consumidor.  Esta barrera de protección de los alimentos puede ser de plástico, papel, cartón, vidrio, metálicos, entre otros. Controlar su inocuidad es de igual importancia que analizar el producto contenido en él.  En la actualidad existen una gran cantidad de normativas que exigen diferentes tipos de Controles para demostrar la inocuidad en ellos.

En la actualidad en nuestro país este punto se regula con el DS 977 de los alimentos, cuya última versión actualizada es la de 14-01-2019 en el Párrafo III De los envases y utensilios, artículos 122 al 129, en donde se define por categorías los insumos que podrían estar en contacto ya sea por ser parte de su fabricación, participar en su embalaje o se pueda utilizar como medio para su consumo.

Lo productos anteriormente mencionados: “deberán estar construidos o revestidos con materiales resistentes al producto y no cederán sustancias tóxicas, contaminantes o modificadoras de los caracteres organolépticos o ni tampoco otros contaminantes constituidos por metales que puedan considerarse nocivos. Asimismo, los utensilios, recipientes, envases y aparatos fabricados con metales no deberán ceder las sustancias antes señaladas en cantidades superiores a las indicadas”.

Casinos River no ha estado ajeno estas normativas y se encuentra a la altura de la innovación, buscando constantemente alternativas de calidad en la entrega de sus preparaciones. Por esta razón es que, a contar de junio de este año, incorporó a sus procesos productivos una nueva línea de envasado, que asegura la calidad e inocuidad de sus preparaciones.

Esta nueva modalidad se realiza bajo un proceso productivo denominado Cook&Chill, donde los alimentos preparados pasan por una etapa de cocción térmica en equipos de tecnología de punta (hornos combinados) y posterior a un abatimiento, que significa inyectar refrigerante inerte, de tal forma de bajar drásticamente la temperatura de las preparaciones entre 0 a 5°C,  para su posterior envasado individual  y distribución en cadena de frio hacia los puntos de entrega.

El contenedor o envase que es utilizado en este proceso garantiza la calidad e inocuidad de nuestras preparaciones y a su vez, mantiene las características organolépticas de los alimentos, además de presentar las siguientes ventajas:

• Más seguridad e inocuidad en la manipulación de los alimentos disminuyendo los riesgos de enfermedades por transmisión alimentaria (ETA).
• Mayor calidad gastronómica.
• Fácil control y disminución de pérdidas de materias primas.
• Mejorar las condiciones de limpieza e higiene de las áreas de producción, mejor aprovechamiento de los espacios de trabajo, menor emisión de desechos orgánicos.

Es probable que para la gran mayoría de personas estos datos pueden pasar inadvertidos. No obstante, la calidad, seguridad e inocuidad que garantiza este proceso permite, entre otras cosas, asegurar la llegada de alimentación colectiva a un determinado lugar, manteniendo sus características propias y posibilita que no se corte la cadena productiva en faenas mineras, por ejemplo, lo que en una época de tantos sobresaltos como ésta, resulta fundamental.

El contenido expresado en esta columna de opinión es de exclusiva responsabilidad de su autor y no representa necesariamente la visión ni línea editorial de Poder y Liderazgo.