Por: Francisca Sotta. Presidenta del directorio de Sistema B Chile
Históricamente las comunidades del centro y sur de Chile han vivido de los intercambios entre organizaciones y agrupaciones de personas. Intercambios comerciales, es decir, ayni en la cultura inca, trueques o trafkintus, en mapudungún, de conocimientos o kimun. Y es que desde siempre, la permuta comercial ha sido parte esencial de nuestra civilización, pues en ese vínculo la comunidades encontraron la oportunidad de abastecerse de alimentos que su entorno no necesariamente proveía, así como también de otros artículos, que facilitaban y mejoraban su calidad de vida.
En un mundo globalizado, donde la transformación digital se ha vivido de una manera extremadamente acelerada debido a la pandemia, aparentemente esas tradiciones de trueque siguen más vigentes que nunca, ahora ampliadas a diversos aspectos del conocimiento. En el mercado no sólo hay intercambio de productos, también de conocimientos, servicios y soluciones innovadoras, acordes a los desafíos de una realidad donde la tecnología rompe fronteras de lo posible día a día. Los intercambios y la colaboración son parte de nuestra esencia como sociedad.
Los pueblos originarios desarrollaron trueques entre comunidades vecinas, en algunos casos, los comerciantes viajaban días, o incluso semanas, para poder permutar sus productos por otros de su necesidad. Lo que antes ocurría entre comunidades cercanas, gracias al desarrollo tecnológico hoy puede practicarse desde y hacia diversas partes del mundo, abriendo al comercio puertas a un sinnúmero de oportunidades.
Por eso resulta primordial fomentar espacios de intercambio, donde emprendedores/as e innovadores/as puedan presentar y ofrecer sus soluciones a empresas más grandes, ya sea dentro del país como también hacia el extranjero. En ese sentido, destaca lo que ha desarrollado “Negocios con Impacto”, plataforma donde grandes, medianas y pequeñas empresas, pueden encontrarse entre sí, generar vínculos entre ellas, así como también con organizaciones públicas y/o privadas.
Sistema B, Mentores de Impacto y Balloon Latam, organizaron, de hecho, la Ronda de Negocios con Impacto Centro Sur de Chile, donde esperan convocar a iniciativas vinculadas al turismo, a diversas industrias y a la comunidad universitaria a un evento virtual para generar alianzas estratégicas.
Son nuestros trueques modernos, pues las rondas de negocios con impacto siguen la misma lógica, se configuran como instancias para colaborar entre organizaciones, intercambiar experiencias y conocimientos, para poner a disposición de otros el saber, expertise, producto o servicio de cada uno. Se reúnen oferta y demanda, pero siempre con un propósito en el centro, compartir lo que mejor hacemos, de manera de poder crecer en conjunto y así generar un entorno sostenible, que integre las necesidades de la sociedad y el medio ambiente, aportando a la economía.
En momentos de alta inflación, con el fantasma de la recesión cada vez más tangible, es urgente buscar espacios donde encontrarnos. Emprendedores/as y empresarios/as, podemos generar valor y oportunidades de desarrollo de forma sostenible. Las Empresas B operamos desde el propósito, de manera interdependiente y las ronda de negocios con impacto son un ejemplo perfecto de ésto. Como dice el proverbio “solos llegamos más rápido, pero juntos, mucho más lejos”.
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