La problemática del agua es objeto de preocupación de toda la comunidad internacional. Limitar el consumo de recursos naturales, incluidas las materias primas, la energía y en especial la correcta gestión del agua, son en la actualidad uno de los temas más recurrentes cuando hablamos de sostenibilidad.

En el mundo de la celulosa y el papel, el agua dulce es probablemente el recurso más crítico. Disminuir las emisiones del proceso a los sistemas de agua y los volúmenes de aguas residuales son la problemática diaria. Por otro lado, la limitada disponibilidad de agua, el aumento del costo del tratamiento de efluentes, el mayor uso de fibra reciclada y la demanda de productos de mejor calidad por parte de los consumidores, exigen una reducción del consumo del agua y un agua de proceso de mayor calidad para que las máquinas y los procesos funcionen correctamente. Un panorama que, sin duda, se transforma en un verdadero desafío para los fabricantes de estas industrias.

Sin embargo, las cargas medioambientales pueden reducirse modificando y desarrollando los procesos tradicionales de fabricación de celulosa y papel, así al menos lo plantea Valmet, multinacional de origen finlandés, proveedora de tecnología y servicios para la industria del papel, la celulosa y la energía.

Carl Mikael Stål, gerente de Ventas y Operaciones de Valmet en Chile, explica que la clave para una adecuada gestión del agua en la industria de la celulosa y el papel es una mejor comprensión del proceso de fabricación, y que esto se logra a través de una correcta evaluación de los procesos y posterior optimización de estos.

“Para lograr este objetivo, lo más importante es dominar en detalle toda la línea de fabricación de celulosa o papel: maquinaria, equipos y procesos. Hay que comprender desde el tratamiento del agua, la reutilización del agua de los procesos y las circulaciones internas, hasta la depuración de los efluentes. Tener una correcta gestión del agua implica planificar, desarrollar, difundir y gestionar el uso óptimo del recurso a nivel de toda la planta”, explica.

Stål añade que, según su experiencia, esta industria ha tomado especial interés en la gestión eficiente del recurso hídrico en los últimos años, motivados por el gran consumo de agua de las plantas productivas, que pueden llegar a consumir millones de metros cúbicos de agua al año.

“Cada vez estamos más conscientes que si bien el agua dulce es un recurso renovable no es inagotable. Esto motiva a nuestra industria a aplicar mejoras sustanciales en la materia, y nosotros como proveedores, ponemos estas necesidades en el centro del desarrollo de las tecnologías de Valmet, ofreciendo soluciones integrales las que incluyen la evaluación de procedimientos, estudios de viabilidad, optimización de procedimientos y procesos avanzados de tratamiento de agua basados en tecnologías de ultrafiltración. Todos, conceptos para reducir el consumo de agua dulce en la producción de estas industrias”, dice Stål.

El ejecutivo agrega que, con una gestión eficaz del agua, las plantas de celulosa y papel obtendrían múltiples beneficios. “No solo estarán garantizando un óptimo funcionamiento con bajos niveles de consumo de agua, sino que también pueden conseguir grandes ahorros cuantificables y mejorar su eficiencia total, disminuyendo las emisiones del proceso a los sistemas de agua, reduciendo el consumo total de energía, y los volúmenes de aguas residuales”, concluye.