Por: Dra. Katherine López Arias. Directora Magíster en Dirección de Negocios. Profesora Titular Escuela de Ingeniería y Negocios UVM

En el dinámico escenario empresarial actual, la sostenibilidad es un propósito fundamental para las organizaciones. Sin embargo, para garantizarlo, se consolide y trascienda en el tiempo, es imprescindible que los directorios asuman un rol protagónico en la gestión de empresas sostenibles.

En este contexto, los gobiernos corporativos constituyen el conjunto de principios, normas y prácticas que rigen la administración y dirección de una empresa. Son el andamiaje sobre el cual se construye la cultura empresarial y se definen las bases para una gestión responsable y transparente. Es en esta estructura donde reside la autoridad para impulsar un desarrollo empresarial que no solo busque éxito en lo financiero y legal, sino que también tenga en cuenta el impacto ambiental y social de su plan estratégico y sus acciones.

A nivel internacional, existen una serie de estándares de referencia como son: Principles of Corporate Governance de la OECD; The UK Corporate Governance Code (que es el código de Gobierno Corporativo del Reino Unido); las NIIF/IFRS (S1 y S2), que son las Normas Internacionales de Sostenibilidad y Clima.

Por su parte en Chile, la Norma de Carácter General 461 de la CMF incorpora exigencias de información sobre sostenibilidad y gobierno corporativo en las memorias anuales. Indudablemente las exigencias nacionales e internacionales están generando un creciente interés y compromiso por parte de las organizaciones en materias de desarrollo empresarial sostenible, impulsando a su vez iniciativas muy valiosas en áreas como energías renovables, conservación del agua, responsabilidad social, economía circular, entre otras.

Por su parte está la Ley 21.595 que sistematiza los delitos económicos y medio ambientales y que entre otras disposiciones amplía la responsabilidad penal de las personas jurídicas, incorpora las figuras que atentan contra el medio ambiente, y regula exhaustivamente tanto figuras penales de contaminación como de daño medioambiental.

En el presente año 2023, aparece también como un antecedente relevante que se haya constituido en el país el Comité de Ministros para el Desarrollo Productivo Sostenible, instancia encabezada por el Ministerio de Economía que busca orientar estratégicamente los esfuerzos del Estado en ciencia, tecnología, innovación y emprendimiento. Dicho comité, está compuesto además por los ministerios de Hacienda, Minería, Energía, Medio Ambiente, Ciencia y Tecnología, y por la Corporación de Fomento de la Producción (CORFO) y tiene por objetivo definir una política de desarrollo productivo sostenible en el país y sus respectivas líneas de trabajo.

Por su parte, la Sociedad de Fomento Fabril (SOFOFA) ha definido como un eje estratégico el desarrollo empresarial sostenible y ha conformado el Comité de Desarrollo Empresarial Sostenible como espacio para intercambiar experiencias y aprendizajes que promuevan e impulsen el desarrollo. Una de las iniciativas más relevantes en este ámbito es el diseño y gestión de un Índice de Sostenibilidad, basado en el modelo ESG, implementado por primera vez el año 2021 con más de 50 empresas evaluadas a la fecha.

Un gobierno corporativo sólido es el que entiende que la sostenibilidad no es solo una moda o tendencia pasajera, sino un imperativo ético y económico, donde se valora a sus empleados, clientes y comunidades locales. Como lo expresó la filósofa española Adela Cortina, de paso reciente por la región de Valparaíso “las empresas del futuro serán éticas o no serán”.

Por todo ello, hay que reiterar que un buen gobierno corporativo es fundamental para el desarrollo empresarial sostenible. Es el pilar sobre el cual se construyen empresas responsables, comprometidas con el bienestar del planeta y de la sociedad. La sostenibilidad ya no es una opción, es una exigencia del presente y del futuro. Aquellas empresas comprometidas con la sostenibilidad serán líderes del cambio, contribuyendo al bienestar global y dejando un legado para la sociedad y las generaciones venideras.

El contenido expresado en esta columna de opinión es de exclusiva responsabilidad de su autor y no representa necesariamente la visión ni línea editorial de Poder y Liderazgo.