En enero de este año fue presentado oficialmente en el norte chileno, el proyecto AtaMoS TeC, mediante el cual se invertirán 13 mil millones de pesos, sumando aportes de Corfo, instituciones y empresas socias, en un plazo de seis años, para generar tecnologías solares óptimas para ser utilizadas en el Desierto de Atacama, por las especiales y únicas características a nivel mundial que presenta la zona nortina
AtaMoS TeC implica además potenciar una red de proveedores locales, la instalación de una fábrica de montajes de paneles y la construcción de una estrategia comunicacional y de marketing, entre otros avances. Para hablar sobre ello, Poder y Liderazgo conversó con la gerente general del proyecto, Bárbara Silva.
Esta trascendental iniciativa fue generada a partir del SERC-Chile donde la beneficiaria es la Universidad de Antofagasta por medio del Centro de Desarrollo Energético, CDEA.
Durante visita a Antofagasta, Bárbara Silva dio a conocer los avances en la implementación de esta mega iniciativa solar, que por su envergadura, constituye un hito histórico para el desarrollo científico y tecnológico del norte de Chile.
¿Qué ha pasado desde el lanzamiento hasta ahora con el proyecto?
“Debido a la amplitud y complejidad del proyecto, estuvimos conformando los diferentes equipos de trabajo donde confluyen varias universidades y centros de estudios internacionales. Junto con eso, avanzamos en la instalación de tecnologías concretas, potenciando las capacidades locales”.
¿Cuáles son los principales problemas enfrentados en esta etapa?
“Principalmente, los diferentes protocolos y tiempos que tienen las instituciones involucradas. Sin embargo, después de un proceso largo y de mucho aprendizaje, llegamos a consensos satisfactorios para todos”.
¿Cuál será la gobernanza que tendrá AtaMoS TeC en la parte operativa?
“De manera transitoria, tenemos un equipo ejecutivo de 4 personas. No obstante, más adelante debemos transformarnos en una corporación privada sin fines de lucro. La idea será siempre que las universidades junto con las empresas asociadas, mantengan un rol protagónico”.
¿Por qué en Antofagasta?
Parte central del desarrollo de AtaMoS TeC se realizará Antofagasta, en la Plataforma Solar del Desierto de Atacama y en la Universidad de Antofagasta. Al cabo del plazo establecido habrá podido desarrollar tecnologías fotovoltaicas que se adapten a las condiciones excepcionales del Desierto de Atacama, como alta radiación, alto promedio de horas de sol, un clima árido, cielos casi sin nubosidad y baja temperatura ambiente, entre otras.
“Va a funcionar en esta ciudad, debido al rol estratégico y descentralizador del proyecto en sí”.
En esta etapa ¿cómo ha funcionado la relación con los organismos internacionales involucrados en el proyecto?
“Ellos tienen mucha expectativa respecto al AtaMoS TeC, pues lo consideran único, debido a las condiciones excepcionales que presenta el Desierto de Atacama para el desarrollo de las tecnologías solares”.
“Creen que es posible potenciar la generación de nuevos productos y servicios para el mercado que, sin duda, impactarán positivamente en la economía de la región y del país”.
¿Qué rol tendrá AtaMos TeC en el futuro Centro de Transición Energética y Materiales Avanzados para el desarrollo del Litio, anunciado por Corfo?
“Somos uno de los pilares de ese centro, constituyéndonos como el primer “joinlab”. Tenemos una gran responsabilidad y mucho que aportar, especialmente en cuanto a la relación con los organismos científicos y tecnológicos internacionales y con el sector privado”.
Como resultado de este desarrollo tecnológico, se podrá reducir el costo de la energía a una meta de 25 US$/MWh al año 2025, y además generar una industria propia que pueda proveer de bienes y servicios a la industria chilena y para la exportación.
Al conocer este proyecto hacen eco las palabras de Rodrigo Mancilla, Director Ejecutivo del Comité Solar de Chile, organismo que es la contraparte técnica del consorcio, quien a principios de este año indicó que “AtaMos Tec ha logrado generar un consenso entre lo público, privado y académico a nivel nacional e internacional para el desarrollo de una industria solar que busca aprovechar las oportunidades de generar tecnologías para zonas desérticas a partir de nuestro laboratorio natural que es el desierto más árido del mundo”.
Un mega proyecto que será noticia en la comunidad internacional por las características únicas que posee, pero que también marcará una diferencia positiva para la comunidad. “Nuestro desafío es adaptar los sistemas fotovoltaicos a las características locales, lo cual producirá que la energía solar tenga un menor costo y esté al alcance de las familias. Esta es una tremenda oportunidad, también para los jóvenes, pues se generará una industria local que necesitará muchos trabajadores calificados y técnicos, así como de profesionales en todo nivel”.
