A juicio del presidente local del gremio, Carlos Ramírez  “La definición de Zona Especial Logística debe ser a partir de un estudio de ingeniería de perfil y conceptual”

Preocupados al percibir que –a la fecha- no existen estudios que avalen la definición de la localización de la Zona Especial Logística para el denominado Corredor Bioceánico a través de un estudio de ingeniería, pero que existe obras que se proyectan como complementarias a éste, se manifestó la Cámara Chilena de la Construcción (CChC) Calama.

De esta forma,  el presidente del gremio de los constructores a nivel local, Carlos Ramírez, comenta que en reunión realizada hace algunos meses con el Alcalde de Calama, representantes de la Cámara de Comercio, Educación, y otros estamentos de la comunidad loína, se conversó el tema, y todos estuvieron de acuerdo en que era necesario realizar la evaluación técnica para la definición del lugar dónde debería estar emplazado y, sólo a partir de ésta definir el programa de trabajo para la concreción de este corredor.

“Hablar de corredor bioceánico es mucho más que hablar de caminos, puertos o ferrocarriles. Se trata de la definición de una plataforma logística en la que confluyan incentivos atractivos para que los empresarios de países vecinos prefieran utilizar nuestros puertos de salida y entrada de sus cargas”, enfatizó Ramírez.

 

El gremialista explicó que por esta razón consideran que debe haber un estudio técnico de la realidad de la región, con las fortalezas y debilidades de cada zona de estos 126.049 km2 de superficie, de estos casi 500 kilómetros de costa, de la realidad de los 4 puertos que existen, de las demandas de los potenciales clientes de Brasil, Paraguay, Argentina, Bolivia y de las coordinaciones logísticas que requieren los productos que entren o salgan del país.

“Tenemos que tener claro que no por el sólo hecho de definir nuestra región como Corredor Bioceánico las cargas de los países vecinos llegarán. Sólo nos elegirán si mostramos ventajas comparativas y ofrecemos un punto de confluencia estratégica atractivo para sus cargas”, puntualizó Carlos Ramírez.

Además, relevó la necesidad de trabajar el tema como región, no sólo apuntando a la capital de ésta y dejando de lado las otras ocho comunas, esto considerando que “tenemos una tremenda Gateway (puerta de entrada o salida), de 500 km., entonces tenemos que conocer a cabalidad las capacidades de nuestros puertos, de manera de definir su oferta de una manera sólida y concreta, y la forma en que cada comuna puede aportar o fortalecerse a través de éstos”. 

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Es en ese marco en el que manifestó la preocupación de la CChC Calama y más aún cuando aparecen publicaciones en la prensa referidas a determinadas rutas viales que se encuentran en carpeta para iniciar su construcción y que forman parte del Corredor. “Si revisamos aparece una ruta que unirá Peine y Baquedano. Nos preguntamos… ¿en qué se basa esa definición?. Claramente si se pensó y asignó recursos para ese camino, sospechamos que Calama no está considerada para efectos de este corredor y eso nos preocupa. Además, ¿existen estudios que aseguren que el Salar no se verá impactado por las obras?, ¿a qué comunidades favorece, aparte de Peine y Socaire; y después de cuánto tiempo?, expresó el presidente la CChC Calama.

Al respecto, agregó que sólo con la definición de la Zona Especial Logísticarealizada a partir del estudio- deberían destinarse los recursos para la implementación del Corredor. Es decir, para construcción de las mejores vías y caminos de acceso, fortalecimiento y/o inversiones (públicas o privadas) en puertos o ferrocarriles, y demás infraestructura, y toda la adecuación política y administrativa necesaria.

En nombre de la organización, Carlos Ramírez declaró que como CChC Calama creen que el estudio de Ingeniería de perfil y conceptual es el camino adecuado para este trascendental avance para toda la región. A su juicio el desarrollo de un corredor sería una palanca de desarrollo económico en todas las provincias y entregará la oportunidad de dejar de ser monoproductores (minería) y abrirse a nuevas palancas productivas que aseguren la sustentabilidad de la región.

“Creemos que Calama es el lugar más adecuado como enclave de esta Zona Especial Logística, pero confiamos en que un estudio así lo determinará”, enfatizó Ramírez y solicitará al Gobierno Regional asegure que se velará por la acuciosidad de este trabajo: “La definición del lugar debe ser con bases irrefutables, evaluaciones cualitativas y cuantitativas, de aportes al VAN, al TIR, al índice de progreso y a la rentabilidad social regional. Estamos seguros que ese lugar debe ser Calama, pero como Cámara, estamos dispuestos a apoyar la mejor propuesta que nos entregue ese estudio que estamos pidiendo”, finalizó Carlos Ramírez.