Por: Richard Andrade C. Director de Poderyliderazgo.cl
Este próximo 21 de noviembre los chilenos tendremos una nueva posibilidad de cambiar la forma de hacer política en nuestro país y, con ello, dejar atrás años de clientelismo, caudillos y acuerdos entre cuatro paredes que solo han respondido a intereses personales o partidistas, postergando las demandas históricas de la ciudadanía.
Como sociedad nos enfrentamos a momentos claves para definir nuestro presente y futuro, la convención constitucional avanza en la redacción de una nueva carta magna, el proceso de descentralización poco a poco comienza a dotar a las regiones de autonomía y capacidades, los tradicionales bloques políticos del país observan como nuevos referentes y liderazgos surgen con un respaldo mayoritario de los chilenos, especialmente de las generaciones más jóvenes que piden cambios estructurales para avanzar hacia un nuevo pacto social.
Hoy los chilenos demandamos más justicia social, oportunidades y garantías de derechos tan esenciales para un buen vivir como la educación, medio ambiente, salud, vivienda y pensiones, y estas elecciones son una nueva oportunidad para avanzar en esa línea, por lo mismo el llamado es a informarse de quienes aspiran a representarnos en el Congreso o en los Consejos Regionales… es tiempo de exigir a los candidatos transparentar quienes los financian, quienes los acompañan y lo más importante de todo, cuáles son sus propuestas para impulsar más y mejores políticas públicas que beneficien a los chilenos y no solo a una determinado sector de la sociedad.
Es cierto que existe un desencanto y malestar evidente con la clase política, por años hemos escuchado sus promesas de legislar y/o generar acciones en favor de nuestros intereses, cuando en la práctica se superponen los de ellos y/o el de sus partidos.
No podemos seguir ausentes de la fiesta de la democracia, dejemos de ser vistos como clientes y reclamemos nuestra condición de ciudadanos, con deberes y derechos por lo demás.
Entonces, no podemos seguir restándonos de votar… porque con esa decisión dejamos la puerta abierta a los mismos de siempre, permitimos que se instale el nepotismo, el clientelismo y la corrupción en los diversos organismos de la institucionalidad pública.
Es tarea de todos recuperar la política, es un deber ciudadano defender la democracia y esta defensa inicia con acudir a votar, luego con mantener un interés permanente por la cuestión pública, por exigir a nuestros representantes cuentas de sus actos.
Este 21 de noviembre vamos a votar, ratifiquemos lo que expresamos con fuerza en el plebiscito para redactar una nueva Constitución y sumémonos con fuerza, pasión y compromiso a la construcción de un nuevo Chile para vivir mejor… sigamos juntos soñando y trabajando por ese país que todos anhelamos y merecemos.
Sin miedo vamos a votar, asumamos el desafío de crecer y desarrollarnos juntos, dejemos de ser meros observadores, seamos protagonistas hoy, mañana y siempre.