María Inés Letelier, de viña El Republicano; y su padre Jorge, de viña “Jorge Letelier”, ganaron premio al Mejor Vino Ancestral en el importante concurso internacional
Este año en el concurso internacional Catad’Or Wine Awards, en la categoría Mejor Vino Ancestral se produjo un empate. Pero todo quedó en familia. Don Jorge Letelier y su hija María Inés, de la comuna de Palmilla en la región de O’Higgins, se adjudicaron el importante premio, con el vino Jorge Letelier Carmenere 2021 y Kelcherewe Cabernet Franc-Carmenere 2020, respectivamente.
Aún emocionados por haber logrado la medalla Gran Oro y el premio al mejor Vino Ancestral, Don Jorge, María Inés y Lorena recibieron en Palmilla la visita de la directora regional (S) de INDAP, Pía Muñoz, el jefe de área Santa Cruz, Álvaro Gálvez, y la encargada del programa Vinos, Romye Barra, quienes les expresaron sus felicitaciones por este premio que representa al valle de Colchagua, a la región y, especialmente, a los pequeños vitivinicultores.
Don Jorge, a sus 92 años sigue pendiente de todo el proceso de producción del vino, contando con el apoyo de su hija Lorena. Recordó que gracias a la reforma agraria recibió 10 hectáreas de viñedos en el sector de Las Garzas y que con otros parceleros vendía a granel las uvas carmenere que crecían en esas tierras. “En esos años se hacía más chicha que vino”, comentó.
Tiempo después decidió destinar una parte de la cosecha de uvas a vinificación y a partir del año 2016, con el apoyo de INDAP, empezó a producir un vino de muy buena calidad, con la etiqueta Jorge Letelier.
Contó que cuando le comunicaron que había ganado el premio mejor Vino Ancestral no pudo dormir de la emoción. Porque es un reconocimiento a la experiencia y al trabajo y esfuerzo de muchos años. Recordó la creación de los primeros sindicatos de campesinos y el proceso dela reforma agraria. Hoy está orgulloso del camino recorrido y de que sus hijos e hijas, al igual que sus nietos (as) continúen la tradición y produzcan vinos de primera calidad.
Una mujer empoderada
María Inés contó que desde niña veía a su padre afanado en el viñedo, por lo que luego de terminar sus estudios medios y de administración y secretariado, no tuvo dudas en que lo suyo tenía relación con los vinos. “Comencé a trabajar en una bodega grande, en Siegel. Después me fui a Viña Sutil y estuve 11 años ahí; fui jefa de producción, estaba a cargo del envasado, etiquetado y despacho”, señaló.
Con toda la experiencia adquirida, en el año 2014 decidió comenzar con su propio emprendimiento: Viña El Republicano. “Le pusimos ese nombre porque queremos que nuestros vinos lleguen a todos, que todo tipo de persona tenga acceso a un vino de calidad”, expresó.
Ese mismo año se acreditó como usuaria de INDAP y se incorporó al programa Vinos, recibiendo apoyo en proyectos y asesoría especializada de los enólogos Arnaud Hereu y Francisca Palacios.
Muy pronto su pequeña viña empezó a ganar fama y premios, lo que fue un incentivo para seguir mejorando e innovando. Con uvas de la viña de su padre y de su parrón hizo un ensamblaje de las cepas Carmenere y cabernet Franc. A la hora de buscar un nombre pensó en un término mapuche: kelcherewe. “Esa palaba significa enredos y como este vino es un ensamblaje, con mis hijas pensamos que es un lindo nombre”, indicó. Y con ese Kelcherewe Cabernet Franc-Carmenere 2020 ganó el premio al Mejor Vino Ancestral.
Relató que “cuando me informaron de este premio, me sentí muy contenta, por mí, por mi familia, por todo el esfuerzo que hemos puesto en este proyecto. Y me alegró especialmente porque soy mujer y porque en este emprendimiento colaboran mis dos hijas, Paula y Catalina. Hemos demostrado que las mujeres somos capaces de alcanzar nuestras metas y sueños”.
De su vino premiado, explicó que es frutoso, equilibrado, con poca madera, de color intenso y persistente en boca, resaltando que “Aproximadamente –precisó- produzco 600 botellas de vino blanco dulce, 1.200 botellas de vino rosé, 5 mil de Republicano Carmenere reserva y 3 mil de Kelcherewe Cabernet Franc-Carmenere. Los precios, según el vino, varían entre 6 mil y 10 mil pesos. Hago envíos a todo Chile. Tengo redes sociales, página web y además formo parte (junto a otros 15 pequeños productores) de la Cooperativa Vitivinícola Campesina de Colchagua (Covicam)”, creada en octubre de 2020 con el objetivo de trabajar en forma asociativa en la compra de insumos y la comercialización de sus vinos.
El Seremi de Agricultura, Cristian Silva; y la directora regional de INDAP, Pía Muñoz, destacaron el buen nivel alcanzado por los pequeños productores de vino de la región; agregando que en las diversas versiones del concurso Catad’Or han ganado medallas de oro y plata; siendo esta la tercera vez que O’Higgins obtiene el premio al Mejor Vino Ancestral.
Subrayaron que “estos vinos son elaborados por pequeños vitivinicultores, que están en todo el proceso, desde que se poda la parra hasta que se elabora y vende el vino”.
En la categoría dedicada a los vinos campesinos de Catad’Or participaron este año 57 productores de INDAP con 140 etiquetas, con un resultado de 27 medallas, 24 de oro y 3 de plata.