Por: Carlos Cantero O. Geógrafo. Doctor en Sociología en la UNED-España. Académico, Conferencista, Asesor y Consultor. Fundador del HUB Desierto de Atacama
Señores políticos entiendan de una vez, hay que respetar la democracia: toda elección debe ser ganada por la persona que tenga la mayoría de votos. Eso debe ponerse en la ley que están tramitando. Los Independientes exigen Igualdad de condiciones en la forma de inscripción para participar en la Convención Constituyente y en los pactos electorales, lo que parece de toda justicia. Despues del categórico repudio ciudadano a la política y los políticos, si ello no ocurre habrá nuevas movilizaciones sociales.
Es increíble que los Parlamentarios y los partidos políticos insistan en sus prebendas para mantener el monopolio y los privilegios de una representación forzada e hipócrita. Es una actitud arbitraria del Parlamento mantener leyes hechas a su medida, para mantener sus condiciones abusivas con impunidad. No puede haber normas que le den ventajas o beneficios arbitrarios respecto de los candidatos Independientes.
Veamos algunas de ellas:
- Mientras los partidos van agrupados en listas, solos o con Independientes, sin que medie ningún requisito. No pueden hacerlo los Independientes ya que les imponen cortapisas, como un alto número de firmas, desigualdad en los trámites adicionales en las notarias e inscripción de un programa. En el pasado los Independientes compitieron solos contra grupos que sumaban sus votos. Todo esto en el tiempo hizo casi imposible que ganaran elecciones los Independientes. La excepción más notable fue Carlos Bianchi, que desplazó a los partidos políticos en la elección senatorial de Magallanes.
- Los independientes deben cumplir con el patrocinio ciudadano de un 0.4% de los votos de la última elección parlamentaria del lugar donde se compite. Para este trámite los candidatos Independientes están obligados a llevar sus patrocinadores a la Notaría para que estampen su firma, con el gasto económico, de tiempo y desplazamientos. Constituyéndose en una barrera de entrada odiosa y discriminatoria que los partidos no tienen. Que, además, en pandemia es muy difícil de lograr.
- Los militantes los partidos políticos usan al Servel y sus plataformas para firmar, muy distinto a lo que ocurre con independientes.
- Con estos procedimientos los partidos políticos se aseguran más candidatos y más cupos, lo que de paso les permite acceder a los recursos que aporta el Estado como Adelanto de la Campaña, lo que se hace con base en la última votación obtenida.
- Es vergonzoso que los Parlamentarios hayan pretendido establecer constituyentes de primera y segunda categoría. Unos electos por votación popular con dietas de 2,5 millones de pesos. Mientras ellos reciben una dieta de 10 millones de pesos mensuales. Eso es arbitrario y discriminatorio.
- Es razonable pensar que los Parlamentarios sinceraron en cuanto estiman que debe ser la Dieta. Por tanto es lógico establecerla como valor común, ahora también para los Parlamentarios en ejercicio. Parlamentarios y Constituyentes deben tener la misma dieta, es decir, deben bajarse la suya a 2,5 millones de pesos. Es de toda justicia. Hacer la ley es mucho más sencillo que hacer la constitución.
- Si se trata de economía de dinero, es razonable pensar que mientras trabaja la Asamblea Constituyente cerremos el Congreso, suspendamos sus dietas parlamentarias, lo que generará un gran ahorro al país, en dinero y problemas.
Los Independientes exigen se respeten las normas constitucionales de igualdad de oportunidades y la no existencia de discriminaciones arbitrarias. Para los comicios de abril próximo se tomarán todas las acciones necesarias: legales, administrativas y de movilización social, para que se respete la norma constitucional: debe haber igualdad de oportunidades en las actividades electorales y en las elecciones entre los independientes y partidos políticos. A eso agregaría igualdad entre legisladores y constituyentes.
El contenido expresado en esta columna de opinión es de exclusiva responsabilidad de su autor y no representa necesariamente la visión ni línea editorial de Poder y Liderazgo.