Por: Raúl Méndez. Regional Application Technology Classical PAM BASF

El Día Mundial del Agua se celebra anualmente el 22 de marzo como un llamado de atención sobre la importancia del agua dulce y la defensa de la gestión sostenible de los recursos de agua dulce. En este contexto, la industria minera juega un papel muy relevante y presenta numerosas oportunidades en materia de cuidado de este recurso.

Es importante señalar que la minería continúa siendo el sector más importante de nuestra economía, representando casi un 55% de las exportaciones totales entre los años 2012 y 2017. El problema es que muchas de las faenas y operaciones se ubican donde la escasez de agua es un factor limitante en el desarrollo regional.

El norte de nuestro país es una de las áreas más secas del planeta y por ende los recursos hídricos son escasos. Si bien el uso del agua en la industria minera representa solo el 3% del suministro de agua de Chile no deja de ser un tema sensible para la industria.

En este contexto la industria minera se enfrenta actualmente a tres grandes problemáticas: aumentar la producción, reducir el consumo de agua y de energía y finalmente crear una sana convivencia entre agua, energía y emisiones, para que puedan convivir bajo un esquema de desarrollo sustentable y que una no vaya en desmedro de la otra.

Para esto BASF ha desarrollado los modificadores reológicos. Entre los beneficios de esta tecnología está la oportunidad de reducir el consumo de agua fresca en la operación, esto implica un depósito con menos agua, lo que significa un menor volumen de represa, un contenido más estable y menos expuesto a producir efectos en el medio ambiente, como sucede con el polvo en suspensión que se levanta con el viento. Y, por otro lado, un menos consumo de energía.

A modo de ejemplo, al aplicar este producto en un depósito normal, la separación entre líquido y sólido se produce casi inmediatamente, lo que permite capturar el agua antes de que se evapore. De esta manera el proceso es mucho más eficiente, porque aumenta la recuperación de agua en rangos entre 10% y 20%.

Para nosotros como compañía es imperativo crear tecnologías efectivas que permitan la correcta optimización del agua y de la energía, esto acompañado de una gestión adecuada que eduque en la reducción del consumo.

El contenido expresado en esta columna de opinión es de exclusiva responsabilidad de su autor y no representa necesariamente la visión ni línea editorial de Poder y Liderazgo.