Por: Nicolás Compte. Gerente de Personas en Adexus

La pandemia ha cambiado el día a día de miles de personas que han debido adaptarse a nuevas formas de trabajo. El uso de la tecnología ha acelerado de manera exponencial la digitalización de las empresas que han tenido que modificar sus operaciones para enfrentar esta nueva realidad, implementando en casi la totalidad de ellas el ya conocido teletrabajo.

En este contexto, a fines del 2020, el estudio “The Future of Jobs Report 2020”, del Foro Económico Mundial, proyectó una expansión significativa de esta modalidad, donde el 44% de las empresas encuestadas aseguró tener el potencial de poder operar su fuerza laboral de forma remota. En la industria tecnológica, el mismo estudio aseguró que el 74% de estas compañías a nivel mundial ya funcionan así.

Este nuevo escenario trajo consigo nuevos desafíos y aprendizajes, dentro de los cuales por el lado más humano se destaca la importancia de contar con colaboradores satisfechos desde la distancia, lo que, sin duda, no ha sido tarea fácil.

En efecto, es fundamental para las organizaciones mantener a sus equipos de trabajo motivados, productivos y fidelizados. ¿Cómo se logra esto? a través de beneficios más amplios relacionados con el tiempo: flexibilidad horaria, días adicionales de vacaciones, espacios de sociabilización, instancias con comunidades y voluntariados, por mencionar algunos. También, es importante generar espacios de conversación entre los trabajadores, ya sea con actividades en equipos, cursos o diversas dinámicas que provoquen cercanía.

Por otro lado, la ciberseguridad se ha posicionado como uno de los aprendizajes más relevantes durante este periodo. Con la pandemia, todas las operaciones e información se trasladaron a la red, situación que ha generado una exposición mucho más alta ante los ciberdelincuentes. Actualmente cualquier empresa que ingresa a la red está más expuesta a riesgos de un ciberataque o estafas cibernéticas y, en este punto, las empresas se vieron en la necesidad de desarrollar una cultura de seguridad y asesorarse por expertos en la materia.

Gran parte de los ataques a las organizaciones van dirigidos buscando el error humano, inducidos por engaños, tras abrir un correo con un virus o ingresar a un link poco seguro que termina por generar una vulnerabilidad a nivel empresarial. De esta manera, las compañías consideraron la importancia de capacitar y educar a los integrantes de la organización para evitar más riesgos.

Teniendo en cuenta lo anterior, el crecimiento, conocimiento y adaptación del teletrabajo se ha logrado de manera exitosa en la mayoría de las organizaciones, demostrando la posibilidad de continuar un futuro así. De todas maneras, aún quedan aprendizajes y cosas nuevas que aprender de esta modalidad que llegó para quedarse.

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