En el marco de la visita oficial que efectúa la mandataria en La Habana
“Como país hemos impulsado una política que hemos llamado de Convergencia en la Diversidad, tendiente a poner énfasis en los acuerdos, en vez de detenernos en diferencias para que las instancias de integración sean factibles. Es lo que, a nuestro juicio, ha contribuido a avanzar en acciones concretas para crear mejores condiciones de vida en la región”. Con estas palabras, la Presidenta Michelle Bachelet dio inicio a su participación en el seminario “Perspectivas del comercio e inversiones: Chile-Cuba”.
En el marco de su visita oficial a Cuba, la Mandataria participó junto al ministro de Economía, Fomento y Turismo, Jorge Rodríguez Grossi, en la inauguración de la jornada efectuada en La Habana.
En su discurso, la máxima autoridad nacional, recordó que en noviembre de 2014, un mes antes del anuncio de diálogo entre Cuba y Estados Unidos, y que sirvió para la reanudación de las relaciones diplomáticas entre ambos países, la Cancillería chilena organizó la primera Misión público-privada en Cuba.
“El nuevo régimen de facilidades y seguridad jurídica al inversionista y, muy especialmente, la Zona Especial de Desarrollo de Mariel, han abierto interesantes oportunidades para ampliar los negocios entre nuestros países”, comentó la Jefa de Estado.
En la misión de 2014 participaron 15 empresas provenientes de la agroindustria, minería, sector sidero-metalurgia, química, turismo y farmacéutica, y se concretaron numerosas citas de negocios. Al año siguiente, la misión público-privada de septiembre del 2015 significó un nuevo salto adelante, con la participación 24 empresas interesadas en explorar inversiones y comercio con Cuba.
Adicionalmente, se fortalecieron los instrumentos bilaterales, a través de la constitución del Comité Empresarial Chile-Cuba y de la suscripción del Tercer Protocolo del Acuerdo de Complementación Económica, que permitió ampliar las preferencias arancelarias del Acuerdo.
“Como país hemos impulsado una política que hemos llamado de Convergencia en la Diversidad, tendiente a poner énfasis en los acuerdos, en vez de detenernos en diferencias para que las instancias de integración sean factibles. Es lo que, a nuestro juicio, ha contribuido a avanzar en acciones concretas para crear mejores condiciones de vida en la región”, dijo la Presidenta.
Agregó que para Chile, América Latina es una prioridad: los empresarios chilenos han desplegado vigorosamente su actividad en el continente, con una acumulación de inversiones que supera los 104 mil millones de dólares.
“Estoy convencida que nuestros empresarios seguirán explorando negocios e inversiones en variados sectores de la economía de Cuba. Este trabajo y su concreción en proyectos conjuntos se ven complementados por la cooperación entre las agencias del gobierno”, manifestó.
Durante 2016, las exportaciones chilenas a Cuba se elevaron a 35 millones de dólares, prácticamente el doble de lo que se exportaba en 1996. Los envíos fueron materializados por más de 60 empresas, 21% de ellas Pymes.
Por su parte, las importaciones chilenas desde Cuba también tuvieron un positivo incremento, pasando de 1,4 millones el año 1996 a 4,3 millones de dólares el 2016. En el campo de las inversiones destaca el reciente proyecto Colas Negras, sobre explotación del hierro, en la que se vincula la empresa chilena RM Asesorías y Comercial Caribbean Nickel de Cuba.
La Mandataria agregó que “no puedo dejar de destacar las cifras de turistas chilenos que han visitado este país, que pasaron de 17.500 el año 2010, a más de 49 mil el 2015, que es la última información que yo tengo disponible”.
Al concluir su discurso, contó que “en pocas semanas más yo culmino mi gestión. La política internacional de mi Gobierno ha estado dirigida a impulsar el entendimiento entre los pueblos, la democracia, los derechos humanos, favorecer la paz, fortalecer las relaciones económicas y trabajar en cooperación en los diferentes ámbitos. Confiamos en que esa línea -que tan buenos resultados ha tenido en, por ejemplo, la creciente presencia de Chile en América Central y el Caribe y, por cierto, en Cuba- seguirá siendo una tónica predominante”.
Y destacó que “el gran proyecto colectivo de la integración regional, colaborar entre todos para buscar oportunidades en nuestro territorio y en el resto del mundo, es un objetivo que interpreta al conjunto de nuestra comunidad. Sigamos por esa senda”.