Según fue confirmado por los integrantes de la Comisión de Minería, la votación de la idea de legislar se concretaría tras escuchar las últimas dos audiencias, entre ellas, la del Ministerio del Medioambiente
La presidenta de la Comisión de Minería de la Cámara de Diputados, Yasna Provoste (DC), valoró el trabajo que están realizando y que la próxima semana debiera dar frutos, con la votación en general del proyecto nacido en iniciativas parlamentarias refundidas, que busca regular el uso del agua en las faenas mineras e incentivar la desalinización marina para dichas labores.
La parlamentaria destacó que se esté dando la oportunidad de desarrollar un debate abierto y franco sobre este tema con la ciudadanía y con los gremios del sector.
“Lo que a nosotros nos parece más destacable es que esto nos ha abierto un diálogo que es necesario poder instalar en nuestro país y que tiene que ver con la actividad y con la industria minera; cómo hoy día se pueden ir incorporando otros elementos que hagan de la innovación, de la utilización de las energías renovables, de la utilización de las aguas de mar una constante y nosotros creemos que aquí las resistencias que a veces se ven desde el punto de vista económico tenemos que ir superándolas con más innovación, con más diálogo con las comunidades y con más desarrollo tecnológico”, remarcó.
La idea, insistió la legisladora, es que, sobre todo en las regiones del norte del país, se pueda conciliar la mantención de la actividad minera tan importante para el desarrollo de la economía, con una adecuada protección del medioambiente y una buena comunicación con las comunidades.
La parlamentaria sostuvo que la propuesta que analizan va justamente en esa línea, al propender que las empresas migren hacia otras alternativas de captación de agua para sus faenas, de modo de reducir la tensión por el recurso con el consumo humano y la agricultura.
Para el diputado Sergio Gahona (UDI), sin perjuicio de la muy buena intención que hayan tenido los autores de los dos proyectos, el tema debe ser abordado con mucho cuidado.
“Hay que tener claridad respecto de los impactos que esto provocaría en el sector productivo de la minería y cuánto efectivamente se puede llevar adelante esto y con la gradualidad con que puede aplicarse. Yo creo que la iniciativa es muy positiva, en el sentido de proteger el agua para el consumo humano, proteger el agua para usos agrícolas, pero también debemos proteger la industria minera y, en ese sentido, tenemos que evaluar hasta donde se puede llegar con esto, qué obligaciones podemos imponer; qué diferencias podemos establecer entre unas regiones”, planteó.
El legislador estimó que, por ejemplo, no es lo mismo usar agua en minería en la segunda región que usarla en la séptima o en la octava región, dado que la disponibilidad de agua es distinta. “Así que aquí no se puede legislar de manera igualitaria para todas las regiones del país. Por lo tanto, yo creo que todavía falta mucho que ver en esto. Ha sido bastante claro también el director general de Aguas respecto a la inconstitucionalidad de alguna parte del articulado transitorio y, por lo tanto, yo creo que esto hay que seguir evaluándolo con mucho detenimiento y seriedad”, insistió.
Los parlamentarios indicaron que, en la discusión en particular, se atenderán algunas de las observaciones presentadas por las organizaciones públicas y privadas que han asistido a la Comisión, particularmente, las planteadas por la Dirección General de Aguas, por ejemplo en lo relativo a la gradualidad de la aplicación de la medida.
Cabe recordar que la industria minera ha sido más proclive a no innovar legalmente en este tema, por cuanto estima que la obligación para el sector sería discriminatoria y, además, innecesaria, ya que varias empresas del sector ya estarían impulsando proyectos de desalinización de agua marina para sus labores.